¿Qué es el Speed Dating?

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Yo, aburrirme, lo que se dice aburrirme... pues no.

Hace poco estaba con una amiga revisionando Sexo En Nueva York (ya sabes, vino, manta, pijama y patatas fritas, todo muy glamuroso) y llegamos al capitulo en el que Miranda acude a un Speed Dating.

Verlo fue divertido a la par que deprimente así que le dije a mi amiga... "nena, es España tiene que existir esto, vamos a buscar".

Y tú dirás;

- Vale pero, ¿qué es el Speed Dating?

Relax, te lo cuento ya mismo.



Speed Dating o Citas Rápidas es una forma de conocer un montón de gente en persona en poco tiempo.

Las empresas que lo organizan te citan en un local (bar, discoteca, llámalo como quieras...) donde tendrás citas de 7 minutos con un número determinado de personas.

Aunque en España lleva poco tiempo, en EEUU es algo de lo más común.
De hecho, el capítulo de Sexo en Nueva York del que hablaba antes se rodó hace 19 años, ahí es nada.

Total, que buscamos en San Google y nos apuntamos, así muy alegremente, entre risas, hasta que llegó el día de la cita y nos plantamos las dos en la puerta del local.

Creo que la frase que más repetimos fue "tía, ¿qué estamos haciendo con nuestra vida?", así, en bucle.  Hasta que llegaron otras 3 chicas igual de despistadas que nosotras, hicimos piña y nos quitamos las tensiones a base de risas. Al final eramos 8 y ya solo por conocerlas a ellas, mereció la pena.

La cosa funciona así:

Entras al local y, habitualmente, las mujeres se sientan en una mesa y serán los hombres los que, cada 7 minutos, roten de mesa en mesa.
Esto te puede parecer peor o mejor, pero es la mecánica del evento.





Y ahí que llega el primero, se sienta contigo y empieza la carrera de fondo.
¿De dónde eres?, ¿ a qué te dedicas?, ¿es tu primer speed dating?, ¿tienes hijos?...
Para mí fue agotador, hablar durante 7 minutos, rápido (de manera inconsciente es como si tuvieses prisa) con 11 personas, SIN PARAR.
Me sentía como la jefa de recursos humanos de cualquier empresa, haciendo el tercer grado a los posibles candidatos al puesto.

Casi 1 hora y 20 minutos habla que te habla (hubo una pausa de 5 minutos, menos mal) con personas totalmente distintas, cada uno de su padre y de su madre (lógico) y repitiendo las mismas preguntas para entablar conversación.

Eso sí, reconozco que en 7 minutos te puedes hacer una idea de cómo es la persona. Esto me sorprendió mucho pues no daba yo un duro por la experiencia. Error.

Es verdad que hay veces que quieres que suene el gong que marca que han pasado los 7 minutos pero otras veces estás a gusto, charlando, y te da pena dejar la conversación a medias.





No obstante, siempre puedes seguir conversando, una vez acabe la velada, con las personas que te apetezca.
Se suelen hacer fiestas después del Speed Dating, las llaman Single Party (porque ya no somos solteros, divorciados o viudos. Somos Singles...)




A pesar de que salí del local medio afónica he de decir que la experiencia fue genial, de verdad.
Estoy segura de que repetiré.

Mi intención era conocer gente (no busco al amor de mi vida ni nada parecido) y pasamos un rato muy divertido, nos reímos mucho.
Conocí a un abogado, un periodista, un conductor de camión de basura, un gestor de seguros, varios informáticos, un administrativo de El Corte Inglés... algunos divorciados, otros solteros.
La mayoría simpáticos y amables, algunos ya habían probado las citas rápidas y para otros era la primera vez.

Vamos, que si te apuntas, tienes donde elegir.

Yo, como iba a mi rollo, a pasarlo bien, una vez terminó la velada me fui con mi amiga a cenar y a tomar algo, pero la experiencia es muy chula.

Por cierto, te darán un papel/cartulina y un boli para que apuntes el nombre de cada uno de los chicos y si quieres tomes notas.
Créeme si te digo que cuando termine la velada tendrás tal tostada en la cabeza, con datos, que no sabrás quién te dijo qué.
Así que sí, apuntar es bien. Pero lo más probable es que no tengas ni tiempo.





Además, en nuestro caso, esa cartulina se la dabas al final a la organización.
Teníamos que apuntar Sí o No al lado del nombre de la persona con la que quisiésemos (o no) seguir teniendo contacto.
Si hay coincidencia entre los dos, al día siguiente te escriben dándote su email para que no pierdas el contacto.

En mi caso tuve 0 coincidencias, especialita que es una, oiga.
Solo le di SÍ a un chico y, obviamente no le interesé, no hubo MATCH.




La próxima vez (porque la habrá) vamos a probar con otra empresa a ver qué tal se lo montan.
Esta estaba muy bien, según leí llevan unos años organizando veladas pero también queremos probar otras cosas como quedadas para hacer catas de vino y cosas así, mas de nuestro rollo.





En definitiva, el que se aburre es porque quiere.
Conocer gente nueva a cierta edad no es nada fácil (aquí te lo contaba) pero, querida, está todo inventado, créeme.